Hace ya tiempo, en la página Facebook de Viavance, hacíamos una pregunta a usuarios y visitantes:
” Ante la actual crisis económica y social, … ¿ Cual es la principal actitud o papel que, en tu opinión, debiera adoptar la persona o ciudadano de a pie ?. “
Os pedíamos que la respuesta fuera, en lo posible, igualmente válida para aplicarse a los miembros de una familia de clase media, a un empresario o banquero, un juez o un gobernante, un economista o un profesor de escuela. Parece materia complicada aunar en unas pocas palabras lo que nos viene a la mente, máxime cuando se pretende que la respuesta pudiera ser igualmente válida para un abanico tan dispar de personas. Distintas formas de pensar y de actuar, distintos cargos o responsabilidades en relación al particular papel jugado en la génesis y desarrollo de la situación social abordada,… ¿ Qué pueden tener en común personas tan dispares ?, podríamos preguntarnos.
Si bien es cierta la gran diferencia existente entre las mismas y sus papeles jugados, no ha de ser tan grande esa diferencia cuando nos referimos a la actitud o papel activo que en este momento y a partir de ahora han o hemos de tomar todos y cada uno de nosotros, independientemente de cual sea nuestra profesión, estatus o carga de responsabilidades personales, familiares, sociales o institucionales. Queda claro que a mayor responsabilidad previa o relevancia del cargo, el compromiso e implicación personal ha de ser aún mayor, … y, en caso de no darse, la sociedad ha de saber juzgar adecuadamente y castigar como grave irresponsabilidad dicha conducta culposa, insolidaria y dañina socialmente. Es tiempo de que la sociedad exija responsabilidades y actuaciones correctoras y/o en su caso compensatorias de las nuevas actividades antisociales que los nuevos tiempos han ido generando, cual lacra interna ( Graves actuaciones de corrupción, fraude, abuso de poder, prevaricación, incumplimiento o irresponsabilidad política, financiera, sanitaria,…etc, con daño a la población o estatus social general de bienestar ).
En este momento lo adecuado es autoresponsabilizarnos y confiar en la propia capacidad y en la suma colaborativa de esfuerzos y cooperación… Todos compartimos esa responsabilidad. En esa dirección, las respuestas que nos distéis, y que desde Viavance hemos desarrollado fueron :
Ética ( conducta ética ) .- Hemos de definir y estructurar una mínima base de acuerdo común y compromiso sobre lo que se pueda exigir a cada uno de nosotros en función de nuestro rol y actuación personal, profesional y social. Ha de quedar firmemente establecida e igualmente claro, nuestra responsabilidad personal tanto de actuación funcional ( ” lo que hemos de hacer o no hacer, y cómo hacerlo adecuadamente “ ) como de actuación correctora o compensatoria responsable ( ” qué nos supondrá y cómo se hará realidad “ ), en caso de no actuar según lo estipulado. Asimismo, hemos de acordar y establecer claramente los mecanismos y medidas legales y sociales, que nos faciliten el adecuado seguimiento y contrastado cumplimiento de dichas normas éticas y compensaciones responsables.
Compromiso e Implicación Personal .- Ya no basta con la queja y señalar la inadecuada actuación del otro. Es tiempo de asumir y comprometerse claramente en la actuación personal, concreta y definida, en función de unos objetivos claros y, a poder ser, en interacción con los de otras personas y/o entidades afines al cambio socioeconómico ( ” a qué acción y/o cooperación me comprometo y en función de que o cuales objetivos “ ).
Fuerza de Voluntad y Actitud Proactiva .- Sabemos que cuesta ponerse manos a la obra y solemos postergar compromisos y actuaciones, pero hemos de autoconcienciarnos y empezar a actuar como ” cuando estamos a punto de perder el autobús y aún sabiendo de la dificultad, corremos decididos, centrados y confiando en nuestra acción y posibilidades. ” Para ello, ” nos trabajaremos ” ( entrenamiento o aprendizaje ) hoy y para el futuro ( preparación escolar y formación de niños y jóvenes ).
Reflexión Crítica .- Trabajar la aceptación y autoconfianza personal que nos haga valorar adecuadamente nuestra persona y forma propia de entender las cosas, de forma que libres del miedo a la valoración de los demás y comprometido con nuestra actuación responsable, nos interese contrastar con los demás nuestras pensamientos y valoraciones, nuestras emociones y formas de actuar. Nos alejamos, así, de adhesiones irreflexivas y acríticas a ninguna causa externa. Al igual que la anterior, implica nuestro propio trabajo y aprendizaje en esa dirección; niños y jóvenes incluidos.
Realismo ( actitud realista ).- Trabajado lo anterior, y ayudados por un mínimo común de conocimientos humanos ( geografía e historia, filosofía, arte y cultura,… nuestra y de otros entornos distintos ), sólo nos queda entrenarnos y acostumbrarnos a observar ” de verdad ” y con respeto, disfrutando y compartiendo con los demás el entorno socio y medioambiental en el que nos movemos. Sin duda aprenderemos mucho mejor a diferenciar lo real de lo imaginario o manipulado; y actuar en consecuencia.
Estas son sólo algunas y ” reales ” vías de avance, que sólo la dejadez y falta de compromiso personal de todos y cada uno de nosotros de un lado, o los intereses privados de algunos personas o grupos de interés particular, de otro, podrían dejarlas en papel mojado sin llevarlas a la acción. Eso ya es otra historia que ahora,… tú, yo y todos nosotros debemos decidir hacia donde queremos y vamos a esforzamos en dirigirla … seas profesor de escuela o economista, político gobernante o juez, banquero, empresario o miembro de una familia de clase media, baja o pudiente, … la tuya.
¿ Trabajamos estas vías, y/o buscamos otras que trabajar ?
Jon Keltsa Martsant ( Dirección Viavance ).